Nonito tendrá que trabajar duro

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Por Carlos A. Nava
SAN FRANCISCO, Calif. -- Nonito Donaire siente que está en la mejor forma física y de boxeo de su vida; listo para enfrentar a Guillermo Rigondeaux.


El campeón mundial filipino ha seguido las mismas rutinas que tanto éxito han dado en su carrera profesional.

Y asegura que cuando se mida al cubano el 13 de abril en Nueva York estará preparado para cualquier tipo de pelea que se presente.

"Guillermo Rigondeaux tiene muchas experiencia amateur", dijo Donaire en su campamento de entrenamiento. "Pero muy poca profesional y es bien diferente".

Donaire está concentrado en San Carlos, California, un suburbio al sur de San Francisco, en el Undisputed Gym.


Rigondeaux (11-0, 8 KO) y Donaire (31-1, 20 KO) se enfrentarán por la unificación de los títulos súper gallo de la Organización Mundial de Boxeo y de la Asociación.



"Tiene un gran currículum como amateur, pero como profesional no mucho", dijo el filipino en referencia al cubano dos veces campeón olímpico. "En profesional es un estilo diferente de pelear y por eso yo no puedo decir cómo será.

"Sólo cuando suba al ring averiguaré cómo es en realidad..."

El monarca de la OMB pronostica enfrentar a un púgil cubano que gusta del contragolpe y que estará estático pocas veces.

Ni siquiera ve a Rigondeaux como el máximo reto de su carrera.

Donaire menciono entre los oponentes de mayor trascendencia y jerarquía a Jorge "Travieso" Arce, a quien noqueó en el tercer asalto de su más reciente pelea.

También señaló al japonés Toshiaki Nishioka, otro al que noqueó, en el noveno round, y a Fernando "Cochulito Montiel, quien sólo le duró dos episodios.

Está invicto en sus últimas 30 peleas desde que perdió en apenas su segunda aparición como profesional.

El filipino de 30 años dijo conocer poco de Rigondeaux, quien apenas tiene 11 combates en el boxeo de paga, su último el 15 de septiembre pasado cuando venció a Roberto Marroquín por decisión.

De cualquier manera, señaló fundamentos del boxeo claves para salir con el brazo en alto.

"Necesitaré poder, fuerza, velocidad", dijo. "Sobre todo tengo que trabajar duro y seguro de mí mismo arriba del ring".

Para evitar sorpresas, Donaire y su equipo de trabajo llevaron de Michigan a California al sparring zurdo Erick DeLeón, un prospecto con sólo dos peleas profesionales y una centena amateur.

"Soy zurdo, como Guillermo y me han pedido que haga mi boxeo, estoy en mi tercer año profesional y antes tuve una gran experiencia amateur", explicó DeLeón. "Veo cómo pelea Guillermo y trato de hacer movimientos similares para ayudar a que Nonito esté listo".

El zurdo DeLeón también ayudó a Donaire en su preparación para enfrentar al japonés Nishioka.

"Nonito está enfocado, listo y se ha preparado igual de duro que contra el japonés", dijo DeLeón. "Sé que va a ganar".

A tres semanas de su combate, Donaire estaba sólo ocho libras arriba de las 122 que marca el límite de la división, algo que, según él, facilita el cierre de su preparación sin tener un desgaste excesivo en los días previos a la pelea.
"Mi mente y cuerpo están listos para la pelea, así que estamos muy, muy emocionados"

Dijo que otra de sus motivaciones es que debutará en el Radio City Music Hall de Nueva York, uno de los escenarios históricos e imponentes del mundo.

"Es un gran honor, pero trato de no pensar en eso. Sólo trato de trabajar duro y ganar la pelea".

El primer round de la pelea entre Donaire y Rigondeaux comenzó antes de la presentación oficial por los términos y programación de exámenes antidopaje aleatorios durante la preparación de ambos.

"Yo no estaría en una conferencia de prensa si el contrato no estaba firmado", comentó. "Ellos había prometido firmarlo, así como yo había prometido enfrentarlo".

"Les di la pelea", agregó, "pero ellos no me estaban dando lo que prometieron, firmar el contrato que incluía las reglas en que nos someteríamos a antidopajes".

NO SE OLVIDA DE ABNER MARES

Tras enfrentar al ex campeón olímpico cubano, Donaire quiere subir a combatir a las 126 libras, donde espera encontrarse de inmediato al campeón Pluma del Consejo Mundial de Boxeo, Abner Mares.

"Estoy emocionado, me encantan los retos", manifestó. "Quiero enfrentar a los mejores, quiero mostrar todo mi potencial, así que estoy emocionado".

"Pero lo primero es lo primero y antes tengo que ganar esta pelea", añadió.

Donaire subirá al cuadrilátero bajo la tutela de Robert García, pero diario entrena a las órdenes de Brian Schwartz, dueño del Undisputed Gym, donde se ha preparado para sus nueve combates anteriores.

"Creo que Nonito está más fuerte, es más rápido e inteligente que antes", mencionó. "Siempre tendrá el boxeo a su favor. Su boxeo es más amplio cada vez".

Schwartz también subestimó a Rigondeaux, de 32 años, como un verdadero campeón mundial profesional y un rival de alto nivel para su pupilo.

Piensa que el cubano intentará meter velocidad y rehuir al intercambio de golpes, después de que sienta el poder de Donaire.

"En otras peleas, cuando (Rigondeaux) siente los golpes prefiere alejarse", explicó. "Y con su inteligencia en el ring, no veo cómo pueda vencerlo".

La campeona olímpica Marlene Esparza, quien también alterna gimnasio con Donaire, coincidió con el entrenador.

"Nonito está mejor que nunca", indicó. "Está motivado y entrena tan duro como siempre. Es el mejor libra por libra de la actualidad. Combina boxeo y poder. No se puede pedir más".

El filipino cerrará su campamento de preparación en San Carlos esta semana y planea llegar a Nueva York el 8 de abril.

"Estoy seguro de que estoy casi ahí, en mi punto", afirmó. "Sólo necesito entrenar un poco más fuerte y estaré listo".

Donaire tiene además una motivación extra, la más especial de su vida, para derrotar a Rigondeaux.

"Estoy esperando la llegada de mi primer bebé y quiero que vea lo que su papá es capaz de hacer...", aseguró.