NINJUTSU (Camino Marcial nº63) Juan Hombre
¿Conocéis a Juan Hombre? (Camino Marcial nº63)
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¿Conocéis a Juan Hombre? (Camino Marcial nº63)
En este programa hablamos con Juan Hombre, referencia del Ninjutsu en España, y os traemos una entrevista con el maestro Minoru Higa, 10°Dan de Karate Shorin Ryu. En la tertulia debatimos sobre las diferencias entre practicar la técnica en el dojo y aplicarklas luego en una situación real.
NINJUTSU (Camino Marcial nº63) Juan Hombre
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Re: ¿Conocéis a Juan Hombre? (Camino Marcial nº63)
Dios, otra vez el innombrable NO¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡.
Re: ¿Conocéis a Juan Hombre? (Camino Marcial nº63)
Pues sí, por estas tierras es muy conocido. Por el lejano Oriente no tanto. Es uno que sin saber nada de artes marciales, con la ayuda de un libro de karate y muchos episodios de la serie de tv Kung-fú, de David Carradine, se inventó un estilo propio y se puso a dar clases.
Citas extraídas de su propia página web:
Todo comenzó a fraguarse, cuando uno de los empleados de mi Padre, se le ocurrió regalarme un libro de Karate pequeñín, que costaba 35pts, si este hombre supiera lo que esto desencadenaría más tarde…? Casi seguido en el año 1974 apareció en la TV Española una serie sobre las Artes Marciales que cambió mi rumbo (y creo que el de muchos otros), hacia el común denominador de las Artes Marciales. El nombre de esta serie era el de KUNG-FU, y desde ese momento mi vida dio un vuelco importante y decisivo, animándome a comenzar con mis primeras experiencias relacionadas con el entrenamiento y la enseñanza marcial.
Mis comienzos fueron con mucha ilusión, decidí reunir un grupo de amigos (Mariño, Eduardo, José Carlos, Eugenio y mis hermanos Pepe y Antonio), quienes guiados por mi liderazgo, con la naturaleza como lugar de entrenamiento y como uniforme unos pijamas de color blanco y a rayas...
... Nos decidimos a dar nuestros primeros pasos, comenzando a crear mi primer estilo al que denominé KUNG FU SHAOLIN, sin tener sinceramente la más remota idea de las técnicas tradicionales allí empleadas, pero cualquier cosa podía servirme para crear y desarrollar las técnicas entrenadas en nuestro Kwoon.
…..............................
yo seguía adelante con mi Kung-Fu, cuya denominación era ya de de SHANG CHI DO.
…..............................
Ya había comenzado a crear mi propio estilo al cual finalmente bauticé como SHENG-CHI-PAI KUNG-FU "La Escuela para el progreso constante y diario del Espíritu".
Y después se pasó al Ninjutsu. Y por ahí sigue de gran maestro.
Dicho sea de paso, además de no saber de artes marciales tampoco sabe nada de chino, por lo que las traducciones de los nombres de su "estilo" tampoco se ajustan a la realidad.
Citas extraídas de su propia página web:
Todo comenzó a fraguarse, cuando uno de los empleados de mi Padre, se le ocurrió regalarme un libro de Karate pequeñín, que costaba 35pts, si este hombre supiera lo que esto desencadenaría más tarde…? Casi seguido en el año 1974 apareció en la TV Española una serie sobre las Artes Marciales que cambió mi rumbo (y creo que el de muchos otros), hacia el común denominador de las Artes Marciales. El nombre de esta serie era el de KUNG-FU, y desde ese momento mi vida dio un vuelco importante y decisivo, animándome a comenzar con mis primeras experiencias relacionadas con el entrenamiento y la enseñanza marcial.
Mis comienzos fueron con mucha ilusión, decidí reunir un grupo de amigos (Mariño, Eduardo, José Carlos, Eugenio y mis hermanos Pepe y Antonio), quienes guiados por mi liderazgo, con la naturaleza como lugar de entrenamiento y como uniforme unos pijamas de color blanco y a rayas...
... Nos decidimos a dar nuestros primeros pasos, comenzando a crear mi primer estilo al que denominé KUNG FU SHAOLIN, sin tener sinceramente la más remota idea de las técnicas tradicionales allí empleadas, pero cualquier cosa podía servirme para crear y desarrollar las técnicas entrenadas en nuestro Kwoon.
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yo seguía adelante con mi Kung-Fu, cuya denominación era ya de de SHANG CHI DO.
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Ya había comenzado a crear mi propio estilo al cual finalmente bauticé como SHENG-CHI-PAI KUNG-FU "La Escuela para el progreso constante y diario del Espíritu".
Y después se pasó al Ninjutsu. Y por ahí sigue de gran maestro.
Dicho sea de paso, además de no saber de artes marciales tampoco sabe nada de chino, por lo que las traducciones de los nombres de su "estilo" tampoco se ajustan a la realidad.
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Shiro_Amakusa
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Re: ¿Conocéis a Juan Hombre? (Camino Marcial nº63)
Sin necesidad de responder a este post o a esta entrevista, pero en relación a un comentario que me hacía una persona sobre unos maestros.
Hay mucha gente en España (españoles y japoneses) a los que hay que agradecerles que en los años de oscurantismo hayan traído las artes marciales a nuestro país. Cuando nadie podía o quería viajar a Japón, algunas de estas personas vinieron a vivir aquí (en el caso de los japoneses) o fueron a hacer un par de cursos a Japón (en el caso de los españoles) y trajeron en los años 70 y 80 diferentes disciplinas, unas más legítimas que otras, pero artes marciales al fin y al cabo. Por eso se les debe agradecer esa labor de pioneros. Muchos de estos pioneros ya han pasado a mejor vida, otros siguen en activo en sus dojo y asociaciones y otros siguen muy muy en activo en las condiciones de legalidad más rigurosas y adscritos a federaciones nacionales del CSD.
Ahora bien, los tiempos han cambiado. No tiene mucho sentido entrenar con alguien que ha ido dos veces a Japón en su vida hace 30 años, o bien entrenar con alguien que no ha vuelto a pisar Japón en 30 años (para entrenar). Pudiendo entrenar con gente que se está formando yendo cada año o varias veces al año a Japón, o directamente ir sin más a la fuente y aprender en Japón.
Ante esta situación algunos optan por crear su propio estilo. Otros, siguen vendiendo algo con casi medio siglo de desactualización o incluso vendiendo algo que han estado enseñando durante 30 años, pero que sólo les costó aprenderlo una semana en Japón durante un curso. Esto no es nada nuevo, en Japón, japoneses de hace más de un siglo ya inventaban sus propios estilos en base a entrenamientos de una semana o unos meses de una escuela.
En cualquier caso, sólo quería dejar aquí esta reflexión.
Hay mucha gente en España (españoles y japoneses) a los que hay que agradecerles que en los años de oscurantismo hayan traído las artes marciales a nuestro país. Cuando nadie podía o quería viajar a Japón, algunas de estas personas vinieron a vivir aquí (en el caso de los japoneses) o fueron a hacer un par de cursos a Japón (en el caso de los españoles) y trajeron en los años 70 y 80 diferentes disciplinas, unas más legítimas que otras, pero artes marciales al fin y al cabo. Por eso se les debe agradecer esa labor de pioneros. Muchos de estos pioneros ya han pasado a mejor vida, otros siguen en activo en sus dojo y asociaciones y otros siguen muy muy en activo en las condiciones de legalidad más rigurosas y adscritos a federaciones nacionales del CSD.
Ahora bien, los tiempos han cambiado. No tiene mucho sentido entrenar con alguien que ha ido dos veces a Japón en su vida hace 30 años, o bien entrenar con alguien que no ha vuelto a pisar Japón en 30 años (para entrenar). Pudiendo entrenar con gente que se está formando yendo cada año o varias veces al año a Japón, o directamente ir sin más a la fuente y aprender en Japón.
Ante esta situación algunos optan por crear su propio estilo. Otros, siguen vendiendo algo con casi medio siglo de desactualización o incluso vendiendo algo que han estado enseñando durante 30 años, pero que sólo les costó aprenderlo una semana en Japón durante un curso. Esto no es nada nuevo, en Japón, japoneses de hace más de un siglo ya inventaban sus propios estilos en base a entrenamientos de una semana o unos meses de una escuela.
En cualquier caso, sólo quería dejar aquí esta reflexión.
Re: ¿Conocéis a Juan Hombre? (Camino Marcial nº63)
En los años 70 ya existían instructores de artes marciales en España. Se practicaba judo (desde varias décadas atrás), karate desde principios de los 60, aikido, y empezaba a llegar el taekwondo.
El nivel no era fantástico. Lo normal en un gimnasio de barrio era que las clases las impartiera un primer o segundo dan.
Incluso los maestros japoneses afincados en España raramente pasaban del tercer dan. Entre los coreanos se podía encontrar algún quinto dan. Pero al menos era algo serio.
El problema es que las películas de Hong Kong y la serie de TV Kung-Fú causaron un tremendo impacto y desataron una fiebre que llenó los gimnasios. Mucha gente se apuntó a las disciplinas existentes, pero muchos otros demandaban lo que no había, es decir, kung-fú. Y no había porque en España apenas teníamos población china. Los pocos chinos que vivían aquí procedían de Taiwan y si alguno practicaba guo-shú, no lo divulgaba a quienes no pertenecían a su cultura o su familia.
Ante esa situación, no faltaron los lanzados, que con escasos conocimientos de karate o taekwondo, libros y muchas horas de cine y TV se convirtieron de la noche a la mañana en maestros de estilos inventados, eso sí, con nombres chinos muy sonoros y bonitos trajes de colorines. Algunos además de forrarse fueron mas lejos y llegaron a dirigir los departamentos de kung-fú federativos, repartiendo títulos y cargos. Y de aquellos, quedan todavía en las federaciones y fuera de ellas.
Claro, a finales de los 70 y principios de los 80 empezaron a llegar chinos de la República Popular y algunos traían un conocimiento muy profundo de estilos chinos tradicionales. Y allí llegó el choque y las divisiones federativas, aprovechando la ignorancia del legislador, y la naciente organización autonómica.
Surgieron así departamentos de kung-fú por aquí, de kuo-shú por allá, de wu-shú, de tai-chi... de nivel nacional, autonómico, de mi pueblo, de mi estilo... cada uno con su parcelita de poder ligada a sus alumnos, sus amigos, etc. y así seguimos. Y como todo está en el BOE, o en los boletines oficiales de cada CCAA o Ayuntamiento de turno, pues todo es legal.
Es cierto que los estilos no surgen de la nada, pero una cosa es fundar un estilo después de décadas de práctica con uno o varios maestros reconocidos y habiendo sudado la camiseta durante miles de horas, y otra inventar un estilo después de haber mirado un libro y pasar miles de horas en el cine o delante de la tele.
Comentando el tema en China con un renombrado maestro de Baguazhang hace años, se me quedó mirando y me dijo: “¿En tu país la policía no detiene a los farsantes?”.
En aquellos tiempos no se detenía ni a los Bárcenas.
El nivel no era fantástico. Lo normal en un gimnasio de barrio era que las clases las impartiera un primer o segundo dan.
Incluso los maestros japoneses afincados en España raramente pasaban del tercer dan. Entre los coreanos se podía encontrar algún quinto dan. Pero al menos era algo serio.
El problema es que las películas de Hong Kong y la serie de TV Kung-Fú causaron un tremendo impacto y desataron una fiebre que llenó los gimnasios. Mucha gente se apuntó a las disciplinas existentes, pero muchos otros demandaban lo que no había, es decir, kung-fú. Y no había porque en España apenas teníamos población china. Los pocos chinos que vivían aquí procedían de Taiwan y si alguno practicaba guo-shú, no lo divulgaba a quienes no pertenecían a su cultura o su familia.
Ante esa situación, no faltaron los lanzados, que con escasos conocimientos de karate o taekwondo, libros y muchas horas de cine y TV se convirtieron de la noche a la mañana en maestros de estilos inventados, eso sí, con nombres chinos muy sonoros y bonitos trajes de colorines. Algunos además de forrarse fueron mas lejos y llegaron a dirigir los departamentos de kung-fú federativos, repartiendo títulos y cargos. Y de aquellos, quedan todavía en las federaciones y fuera de ellas.
Claro, a finales de los 70 y principios de los 80 empezaron a llegar chinos de la República Popular y algunos traían un conocimiento muy profundo de estilos chinos tradicionales. Y allí llegó el choque y las divisiones federativas, aprovechando la ignorancia del legislador, y la naciente organización autonómica.
Surgieron así departamentos de kung-fú por aquí, de kuo-shú por allá, de wu-shú, de tai-chi... de nivel nacional, autonómico, de mi pueblo, de mi estilo... cada uno con su parcelita de poder ligada a sus alumnos, sus amigos, etc. y así seguimos. Y como todo está en el BOE, o en los boletines oficiales de cada CCAA o Ayuntamiento de turno, pues todo es legal.
Es cierto que los estilos no surgen de la nada, pero una cosa es fundar un estilo después de décadas de práctica con uno o varios maestros reconocidos y habiendo sudado la camiseta durante miles de horas, y otra inventar un estilo después de haber mirado un libro y pasar miles de horas en el cine o delante de la tele.
Comentando el tema en China con un renombrado maestro de Baguazhang hace años, se me quedó mirando y me dijo: “¿En tu país la policía no detiene a los farsantes?”.
En aquellos tiempos no se detenía ni a los Bárcenas.
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Shiro_Amakusa
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Re: ¿Conocéis a Juan Hombre? (Camino Marcial nº63)
El problema viene cuando en ocasiones «los farsantes» estan apoyados por miles de alumnos cuando «los otros» son cuatro gatos. Y ya no te quiero contar cuando «los farsantes» estan apoyados por grandes federaciones españolas y japonesas ligadas al Gobierno y a los mas altos cargos del deporte nacional e internacional, y «los otros» siguen siendo cuatro gatos.
Y que conste que no me estoy refiriendo a ningún arte marcial en particular, sino en rasgos generales.
Y que conste que no me estoy refiriendo a ningún arte marcial en particular, sino en rasgos generales.
Re: ¿Conocéis a Juan Hombre? (Camino Marcial nº63)
Creer en 2017 que alguien va a ser buen instructor porque ha viajado mucho a japón es igual que creer que alguien es buen profesor de tango por ser argentino.
Creo que ya es momento de desmitificar la mística oriental. Hace mucho tiempo que hay excelentes instructores de casi cualquier disciplina que ni son japoneses ni entren allí 'varias veces al año'.
Para llegar al nivel en que de verdad es necesario 'acudir a la fuente' (sea lo que sea eso) son precisos muchos años de base. Si no, es echar agua en un vaso que no sabe vaciarse.
A nadie se le ocurre decir que un instructor de kickboxing o boxeo que no ha ido a estados unidos o inglaterra nunca está obsoleto, a la par que hay formidables entrenadores de Judo con décadas de trayectoria y excelentes resultados (propios y de sus alumnos).
Es una de las cosas buenas de las artes marciales deportivas y la que más echo de menos desde que entré en las tradicionales: que para saber quién era buen practicante no había que contar diplomas. Los conocíamos por su nombre y apellido, no necesitaban una larga lista de palabras en chino, coreano o japonés detrás del mismo.
Y por supuesto, para mi opinión del asunto del hilo, quien no la conozca puede revisar hilos más antiguos.
Creo que ya es momento de desmitificar la mística oriental. Hace mucho tiempo que hay excelentes instructores de casi cualquier disciplina que ni son japoneses ni entren allí 'varias veces al año'.
Para llegar al nivel en que de verdad es necesario 'acudir a la fuente' (sea lo que sea eso) son precisos muchos años de base. Si no, es echar agua en un vaso que no sabe vaciarse.
A nadie se le ocurre decir que un instructor de kickboxing o boxeo que no ha ido a estados unidos o inglaterra nunca está obsoleto, a la par que hay formidables entrenadores de Judo con décadas de trayectoria y excelentes resultados (propios y de sus alumnos).
Es una de las cosas buenas de las artes marciales deportivas y la que más echo de menos desde que entré en las tradicionales: que para saber quién era buen practicante no había que contar diplomas. Los conocíamos por su nombre y apellido, no necesitaban una larga lista de palabras en chino, coreano o japonés detrás del mismo.
Y por supuesto, para mi opinión del asunto del hilo, quien no la conozca puede revisar hilos más antiguos.
Re: ¿Conocéis a Juan Hombre? (Camino Marcial nº63)
Perdón: en 2018.
Feliz año y perdón por el retraso.
Feliz año y perdón por el retraso.