Pues pa que haya de todo, yo he de decir que al contrario que el invitado, desde que practico AAMM tengo menos broncas y problemas, creo que principalmente por 2 razones:
1.- Sé que me puedo defender mejor por lo tanto no tengo que estar tan agresivo ni ponerme en primera fila. Así que estoy mucho más tranquilo y relajado ante la posibilidad de un enfrentamiento ni me preocupa lo más mínimo que opinen que soy un cagueta porque paso de problemas.
2.- Tengo muy claro que por muy bien que se me dé, me puedo hacer pupa hasta atizando con lo cual, no me apetece nada tampoco entrar en follones (peleas) que no me sean imprescindibles porque me voy a hacer pupita casi seguro y eso no mola nada.
Un saludo
Mariconeo Marcial (continuación..)
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Antonio Leyva
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Vamos a ver. Las artes marciales engloban gran número de "asignaturas", que para ser completas, deben complementarse.
Por un lado, está la técnica "física", sin ella, pocas posibilidades puede haber de ser "eficaz" en un combate.
Por otro lado, la técnica debe sostenerse con una completa preparación mental. Tener un cuerpo muy "rápido" pero una mente "lenta", no sirve para nada. Tener una mente despierta y "ágil", pero un cuerpo "cervecero" que no es capaz de actuar de forma rápida y contundente, tampoco.
Las artes marciales llevan aparejado un entrenamiento mental (léase meditación), cuya finalidad es o puede ser múltiple, pero en lo que a marcial se refiere, tiene por objetivo aumentar nuestra eficacia, otorgando calma, precisión y "enfoque" ante cualquier situación. La pregunta es ¿donde saben meditar mejor?, y la respuesta claro está es "en los monasterios", no en vano se pasan el día en ello. Así que los artistas marciales aprendieron meditación de monjes, que inicialmente, no sentían interés alguno por lo marcial.
La meditación utilizada por los monjes, tenía y tiene un alto porcentaje de mística entre sus fines y esta mística influyó y mucho en muchos estilos.
Por otro lado, los monjes, precisaban una vida larga, para poder alcanzar sus metas espirituales. Gracias a trabajos internos, preservaban su salud, pero eso no les salvaba de palmar frente a un bandido, ladrón, ejército hostil, etc. Por eso, los monjes se ven atraídos por las artes marciales. Son ellos los que sin embargo instauran una larga serie de condiciones antes de usar sus habilidades, influidos por su religión y principios.
De esta forma tenemos artistas marciales "seglares" que se ven influenciados (más o menos según el caso), por las habilidades de los monjes y por algunas de sus normas, aunque en principio, no rechazan frontalmente el uso de la violencia.
Por otro, monjes que a su conocimiento "accidental" sobre energía interna (su objetivo era espiritual y no tanto físico), meditación, etc, suman nuevos conocimientos marciales, que intentan adaptar con toda la contradicción que esto supone, a unas normas religiosas que rechazan la violencia.
Kuan Ti dijo:
<<...el día que el kung Fu o el Tai chi, abandone la senda del Budismo o del Taoísmo, que conmigo no cuenten.... aunque fueran creadas para la guerra.>>
Ni lo pueden abandonar ni pueden entrar más, dependiendo de cual sea el origen de tu estilo, el componente religioso será mayor o menor.
Por cierto, el que el Tai Chi Chuan sea un arte de origen religioso es algo discutible, y eso a la luz de nuevas investigaciones que parecen acercar de nuevo el origen del TCC a Wudang. Hace unos años, era una opinión descartada de forma categórica.
De todas formas, los estilos más conocidos, (Yang, Chen, Wu, Hao y Sun), tienen un componente religioso prácticamente nulo y lo mismo podrían ser de origen budista que taoísta que chamánico....
Antonio.
Por un lado, está la técnica "física", sin ella, pocas posibilidades puede haber de ser "eficaz" en un combate.
Por otro lado, la técnica debe sostenerse con una completa preparación mental. Tener un cuerpo muy "rápido" pero una mente "lenta", no sirve para nada. Tener una mente despierta y "ágil", pero un cuerpo "cervecero" que no es capaz de actuar de forma rápida y contundente, tampoco.
Las artes marciales llevan aparejado un entrenamiento mental (léase meditación), cuya finalidad es o puede ser múltiple, pero en lo que a marcial se refiere, tiene por objetivo aumentar nuestra eficacia, otorgando calma, precisión y "enfoque" ante cualquier situación. La pregunta es ¿donde saben meditar mejor?, y la respuesta claro está es "en los monasterios", no en vano se pasan el día en ello. Así que los artistas marciales aprendieron meditación de monjes, que inicialmente, no sentían interés alguno por lo marcial.
La meditación utilizada por los monjes, tenía y tiene un alto porcentaje de mística entre sus fines y esta mística influyó y mucho en muchos estilos.
Por otro lado, los monjes, precisaban una vida larga, para poder alcanzar sus metas espirituales. Gracias a trabajos internos, preservaban su salud, pero eso no les salvaba de palmar frente a un bandido, ladrón, ejército hostil, etc. Por eso, los monjes se ven atraídos por las artes marciales. Son ellos los que sin embargo instauran una larga serie de condiciones antes de usar sus habilidades, influidos por su religión y principios.
De esta forma tenemos artistas marciales "seglares" que se ven influenciados (más o menos según el caso), por las habilidades de los monjes y por algunas de sus normas, aunque en principio, no rechazan frontalmente el uso de la violencia.
Por otro, monjes que a su conocimiento "accidental" sobre energía interna (su objetivo era espiritual y no tanto físico), meditación, etc, suman nuevos conocimientos marciales, que intentan adaptar con toda la contradicción que esto supone, a unas normas religiosas que rechazan la violencia.
Kuan Ti dijo:
<<...el día que el kung Fu o el Tai chi, abandone la senda del Budismo o del Taoísmo, que conmigo no cuenten.... aunque fueran creadas para la guerra.>>
Ni lo pueden abandonar ni pueden entrar más, dependiendo de cual sea el origen de tu estilo, el componente religioso será mayor o menor.
Por cierto, el que el Tai Chi Chuan sea un arte de origen religioso es algo discutible, y eso a la luz de nuevas investigaciones que parecen acercar de nuevo el origen del TCC a Wudang. Hace unos años, era una opinión descartada de forma categórica.
De todas formas, los estilos más conocidos, (Yang, Chen, Wu, Hao y Sun), tienen un componente religioso prácticamente nulo y lo mismo podrían ser de origen budista que taoísta que chamánico....
Antonio.
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- Registrado: 24 Nov 2002 03:48
Yo, al contrario tanto de Invitado, como de Man Bunny, no he cambiado mucho desde que practico artes marciales. Quiero decir que siempre he evitado las peleas y las situaciones potencialmente peligrosas, si bien ahora he ganado un poco en seguridad.
Ahora se que tengo las herramientas para hacer daño de forma muy rápida, aunque una cosa es el gimnasio y otra la calle. Por eso, no tengo el menor interés en probarlo. Como decía Invitado, si no sabes nada evitas el peligro, y cuando sabes, lo buscas. Eso es convertirse en un abusador (no lo digo por Invitado, que quede claro que él se ha sincerado), ya que nadie la busca cuando sabe que va a perder.
Como digo, hay otras cosas en la vida, que no se valoran sino cuando se pierden. Eso lo han entendido muchos con dolor, y yo puedo aprenderlo de su experiencia. Sólo el que no tiene problemas se busca más en la calle.
Ahora se que tengo las herramientas para hacer daño de forma muy rápida, aunque una cosa es el gimnasio y otra la calle. Por eso, no tengo el menor interés en probarlo. Como decía Invitado, si no sabes nada evitas el peligro, y cuando sabes, lo buscas. Eso es convertirse en un abusador (no lo digo por Invitado, que quede claro que él se ha sincerado), ya que nadie la busca cuando sabe que va a perder.
Como digo, hay otras cosas en la vida, que no se valoran sino cuando se pierden. Eso lo han entendido muchos con dolor, y yo puedo aprenderlo de su experiencia. Sólo el que no tiene problemas se busca más en la calle.