Si, pero los principios, como su nombre indica, son solo un punto de partida, y por muy bien incorporados que los tengas a tu movimiento los tienes que incorporar también a las acciones puntuales que van a surgir como respuesta a un ataque real.Antonio Leyva escribió: Para mi un buen TCC se basa en ciertos principios (muy bien explicados arriba) y no tanto en "mañas".
Lo que yo estoy intentando aclarar es que la práctica de las técnicas que se ejecutan en las formas es el único medio que tienes de explotar la riqueza que las formas custodian. El TCC tiene un patrimonio marcial que se está perdiendo por los mismos motivos que otras artes tradicionales han perdido los suyos en aras del combate deportivo limitado. Solo que en el caso del TCC ni siquiera se compensa con la ventaja de someterse a una situación de confrontación directa.
Si solo confías en el tuishou como medio para desarrollar esos principios, acabarás por ser incapaz de aplicarlos en situaciones y distancias ajenos a esta práctica tan agradable, tan importante en el TCC pero tan ajena a la realidad del combate. Es esa actitud de no querer despeinarse la que lleva a creer a la mayoría que el TCC consiste en la simple habilidad de desequilibrar a alquien a base de ceder y/o empujar. Yo creo por el contrario que los principios tienen que ir dentro de un buen rodillazo en los testículos o de una buena torsión de cervicales, como el detonante dentro de la masa explosiva y cito técnicas que espero cualquier practicante serio de TCC sabrá hallar en las formas.
No debemos hablar de lo mismo cuando se compara el trabajo de técnicas (del que miembros de alguna escuela han presumido tanto al compararse con otras) con hacer trucos. Quizá alguien que muchos principios tenga que recoger sus dientes del suelo si no sabe como contrarrestar el vil "truco" de que un adversario le plante un directo de derecha en la boca. Cosa que a base de principios no vas a estar en condiciones de evitar. Las técnicas si están diseñadas para ello, aunque necesitan de los "principios" para surgir en el momento oportuno.
Ese trabajo de técnicas va a afilar las puntas de tus movimientos globales basados en principios excelentes y al menos tus respuestas tendran la suficiente intención destructiva como para permitirte interrumpir la acción agresora. Yo no soslayaría esta etapa del aprendizaje mientras esperas algunas décadas a que tu habilidad sea tal que puedas librarte de tus adversarios sin saber como lo hiciste. Todo apunta al mismo objetivo.
Quizá la armonía del tuishou se interrumpa con la incorporación de ataques o respuestas preconcebidos, pero tu bien sabes que eso evita la ceguera de creerse preparado para cualquier cosa sin molestarse en comprobarlo.
Yo no me adheriría a las técnicas demasiado pero menós aún a la ausencia de técnicas. Pero allá cada uno en su torre de marfil.
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Lo que me ha contestado pahui me parece muy bien contestado y no tengo nada que añadir.
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Respecto a la influencia de las mujeres de argón (mañas) en el TCC, me reservo mi opinión.....
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