Lo de siempre, yo creo que queréis dar una solución a través de las artes marciales a un problema que es meramente psicológico.
Sin embargo si me hubiese ocurrido a mi con una visible probabilidad de poder enfrentarlos (y ganar) y yo reaccionara de la misma manera que ustedes hicieron, mi autoestima estaría muy abajo y me mente remoliendome de angustia por la sumisión.
El tener angustia o no es problema psicológico de cada uno, así como el dejar la autoestima propia en manos de cualquier macarra es decisión de cada uno.
De hecho el ser asaltado o no por un individuo (Ojo, si es un SOLO atacante y no pertenece a la excepción que comentaré luego) depende EXCLUSIVAMENTE de factores psicológicos. Antes de que te agredan, o antes incluso de que invadan la burbuja de tu espacio personal, el asaltante elige a su víctima por :
-forma de andar. Si creéis que esto no es cierto fijaos que entre vuestros conocidos habrá gente que no ha sido atracada en su vida y otros lo han sido varias veces.
Al acercarse y ser percibido por la víctima por
-cambio de ritmo y de postura. Haced la prueba siguiente: de noche cambiad de acera cuando veais por la otra a alguien y seguidla discretamente. Tras repetir media docena de veces el experimento veréis reacciones distintas y hasta podréis empezar a detectar a la gente que tiene miedo.
Si uno ha dado el perfil de "víctima" o esta estático se pasa al estadio siguiente
-intercambio ocular. Si se baja, esquiva la mirada mientras se hacen gestos de nerviosismo o por el contrario se mantiene la mirada demasiado se pasa al estadio siguiente
-interacción verbal. Ahí hay una escalada progresiva mientras se estudian nuestras reacciones verbales y no verbales. Primero el eh tío tienes un cigarrillo? para ir subiendo de tono según la contestación.
El estudiante de artes marciales debería saber que el arte de la estrategia es más importante que el de lanzar patadas. Fijaos en los guerreros modernos: no en los ninjas, ni en los boinas verdes, sino en los emigrantes que pueblan nuestras calles y que vienen de sitios donde la vida no vale nada. Están totalmente alerta, "aquí y ahora" mapeando el territorio con su visión periférica, sabiendo cómo moverse y cómo mirar.
La excepción a la regla que ponía antes es el "explosivo", el tipo que bien por droga, por trastorno psiquiátrico o por problema personal grave tiene los "cables cruzados" y la emprende con el primero que se le cruce en su camino.
Y naturalmente, estamos hablando de UN SOLO agresor, porque cuando son varios... Bueno hace poco un campeón del thai y del kick se enfrentó a siete y ya sabemos que pasó. Las artes marciales dan para lo que dan.
Y sobre todo no os llevéis mal rato, ni os dejéis ganar por el miedo o la pérdida de autoestima. Muchas veces los maleantes y abusadores callejeros juegasn a un juego más sutil que el de "yo te pego y te hago daño luego gano". Es el juego de "yo te hago sentir que eres una mierda y gano". Saben que pueden hacer más daño psicológico que físico. lo saben porque llevan toda su vida sintiéndose una mierda.
Perdón por la chapa.
Un saludo.